Escándalo por culpa de un euro
Siempre que se habla de que los ciudadanos aporten una cantidad mínima cada vez que necesitan usar un servicio público, en este caso el sanitario, se alzan voces escandalizadas porque se pone en peligro el estado del bienestar. Esta misma semana, la consejera de Salud de la Generalitat catalana ha lanzado la idea de que para financiar una parte del déficit sanitario que tiene su comunidad habría que pedir un euro a los pacientes cuando éstos acudan a una consulta médica. No es la primera vez que se sugiere que una forma de paliar los problemas económicos y, sobre todo, de atemperar un poco la demanda, a veces excesiva, de los servicios sanitarios sería solicitar una aportación, por pequeña que sea. Muchos otros países europeos la tienen implantada sin que se haya puesto en peligro la equidad y el acceso al sistema. Para España, un euro por consulta no parece excesivo, ni siquiera para clases pasivas. Muy pocos consumidores tienen que ir al médico más de tres o cuatro veces cada mes. Las críticas que ha levantado la idea catalana parecen desde fuera demagógicas. Más temprano que tarde habrá que debatir en profundidad y sin partidismos el copago.
SISTEMA.
El debate sobre los problemas de la financiación de la sanidad en nuestro país aún no se ha llevado a cabo. Lo que es incuestionable es que la demanda que hará la población de los servicios médicos continuará aumentado en el futuro. Si seguimos estando entre las 10 primeras economías del mundo, pediremos servicios sanitarios de máximo nivel. ¿Puede el Estado garantizar este servicio público financiado tan sólo con impuestos y gastándose 1.000 euros por habitante y año? ¿Es hora, de una vez, de plantear elevar en un punto, por lo menos, el porcentaje de PIB que invertimos en mantener la salud o recuperarla cuando se ha perdido? Ésas son las cuestiones que habría que poner encima de la mesa. Durante mucho tiempo los políticos han evitado hacerlo. No podrán mantener esa postura nihilista por más tiempo.
no es descabellado, pero yo tengo otro metodo jajaja
SISTEMA.
El debate sobre los problemas de la financiación de la sanidad en nuestro país aún no se ha llevado a cabo. Lo que es incuestionable es que la demanda que hará la población de los servicios médicos continuará aumentado en el futuro. Si seguimos estando entre las 10 primeras economías del mundo, pediremos servicios sanitarios de máximo nivel. ¿Puede el Estado garantizar este servicio público financiado tan sólo con impuestos y gastándose 1.000 euros por habitante y año? ¿Es hora, de una vez, de plantear elevar en un punto, por lo menos, el porcentaje de PIB que invertimos en mantener la salud o recuperarla cuando se ha perdido? Ésas son las cuestiones que habría que poner encima de la mesa. Durante mucho tiempo los políticos han evitado hacerlo. No podrán mantener esa postura nihilista por más tiempo.
no es descabellado, pero yo tengo otro metodo jajaja
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