UN CUIDADOSO SEGUIMIENTO
Psicoterapia y Prozac para tratar la
epresión en adolescentes
Una pastilla no es suficiente para tratar la depresión en los jóvenes. Según los resultados de un ensayo clínico, el tratamiento de esta enfermedad en la adolescencia es más eficaz cuando se combina psicoterapia y Prozac. El seguimiento estrecho del paciente mejora el trastorno y disminuye el riesgo de suicidio.
En los últimos meses, las autoridades sanitarias han advertido que se extremen las cautelas con los tratamientos de la depresión infantil debido al incremento producido en la tasa de suicidios entre estos pacientes. Actualmente, tan sólo la fluoxetina, más conocida como Prozac, está aprobada para tratar este trastorno psiquiátrico en los niños.
La psicoterapia es una buena opción terapéutica para los adultos con depresión. Sin embargo, no hay ningún estudio que compruebe la eficacia de este tratamiento en adolescentes con esta enfermedad.
Por este motivo, investigadores de la Universidad de Duke, en Durham (EEUU) han llevado a cabo un estudio, publicado en 'Journal of American Medical Association' ('JAMA'), con 439 pacientes de entre 12 y 17 años con diagnóstico de depresión grave. Los participantes fueron asignados a cuatro grupos: tratamiento con fluoxetina, psicoterapia, psicoterapia con fluoxetina o placebo (sustancia inactiva).
La psicoterapia se basó en el supuesto de que la depresión estaba originada o mantenida por patrones de pensamientos depresivos y por la falta de conductas positivas. De esta manera, en 15 sesiones de entre 50 y 60 minutos durante 12 semanas, se llevó a cabo una psicoeducación sobre la depresión y sus causas, se establecieron metas con el adolescente, se evaluó el estado de humor, se incrementaron las actividades gratificantes y se dio herramientas para solventar problemas sociales y cognitivos. También se llevaron a cabo sesiones con los padres.
Resultados
Tras 12 semanas de tratamiento, los resultados mostraron que la respuesta al tratamiento fue mayor en el grupo al que se le administró fluoxetina y psicoterapia (71%), en comparación con el que recibió sólo el medicamento (60,6%), la psicoterapia solamente (43,2%) o el placebo (34,8%).
Los investigadores también evaluaron la aparición y seguimiento de pensamientos o intentos de suicidio. Así, frente al 27% de los adolescentes que al inicio del estudio tenía ideas suicidas, al final del tratamiento sólo seguía con esta conducta el 6% de los participantes, habiendo intentado suicidarse el 1,6% (siete pacientes) sin haber completado el suicidio ninguno de ellos. Esta mejoría se produjo por igual entre los cuatro grupos de pacientes.
Los autores del estudio concluyen que tanto la fluoxetina como la psicoterapia deberían ser dos herramientas terapéuticas ampliamente disponibles para el tratamiento de la depresión en adolescentes.
Matices
Por otro lado, en un editorial publicado también en 'JAMA', Richard M. Glass, doctor del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Chicago (EEUU) y editor adjunto de la revista, explica que los resultados de este estudio todavía dejan sin contestar algunas preguntas. Una de ellas es si la fluoxetina es el único psicofármaco eficaz para tratar la depresión en niños y adolescentes. "Las respuestas a esta cuestión no están claras debido al ocultamiento de importantes datos de ensayos clínicos controlados sobre los inhidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) [o fármacos antidepresivos]".
Otra duda que no ha resuelto esta investigación es "si la psicoterapia por sí sola es eficaz para tratar a adolescentes con una depresión moderada o grave", comenta el doctor Glass.
"La reducción de ideas suicidas a lo largo del tiempo es tranquilizador, pero el incremento del riesgo de episodios adversos relacionados con una conducta dañina observada en los pacientes que tomaron fluoxetina sugiere que el aumento de la actividad, irritabilidad o desinhibición asociada algunas veces con los ISRS precisan de un seguimiento más cuidadoso en la práctica clínica", explica el editorialista.
Finalmente, el editorial hace hincapié en la necesidad de ser conscientes del enorme problema que supone la depresión tanto para adolescentes como para adultos e insiste en que el éxito en el tratamiento de esta enfermedad "requiere algo más que una breve visita para prescribir una medicación... Precisa de una prudente valoración y seguimiento en el contexto del desarrollo de la relación médico-paciente".
epresión en adolescentes
Una pastilla no es suficiente para tratar la depresión en los jóvenes. Según los resultados de un ensayo clínico, el tratamiento de esta enfermedad en la adolescencia es más eficaz cuando se combina psicoterapia y Prozac. El seguimiento estrecho del paciente mejora el trastorno y disminuye el riesgo de suicidio.
En los últimos meses, las autoridades sanitarias han advertido que se extremen las cautelas con los tratamientos de la depresión infantil debido al incremento producido en la tasa de suicidios entre estos pacientes. Actualmente, tan sólo la fluoxetina, más conocida como Prozac, está aprobada para tratar este trastorno psiquiátrico en los niños.
La psicoterapia es una buena opción terapéutica para los adultos con depresión. Sin embargo, no hay ningún estudio que compruebe la eficacia de este tratamiento en adolescentes con esta enfermedad.
Por este motivo, investigadores de la Universidad de Duke, en Durham (EEUU) han llevado a cabo un estudio, publicado en 'Journal of American Medical Association' ('JAMA'), con 439 pacientes de entre 12 y 17 años con diagnóstico de depresión grave. Los participantes fueron asignados a cuatro grupos: tratamiento con fluoxetina, psicoterapia, psicoterapia con fluoxetina o placebo (sustancia inactiva).
La psicoterapia se basó en el supuesto de que la depresión estaba originada o mantenida por patrones de pensamientos depresivos y por la falta de conductas positivas. De esta manera, en 15 sesiones de entre 50 y 60 minutos durante 12 semanas, se llevó a cabo una psicoeducación sobre la depresión y sus causas, se establecieron metas con el adolescente, se evaluó el estado de humor, se incrementaron las actividades gratificantes y se dio herramientas para solventar problemas sociales y cognitivos. También se llevaron a cabo sesiones con los padres.
Resultados
Tras 12 semanas de tratamiento, los resultados mostraron que la respuesta al tratamiento fue mayor en el grupo al que se le administró fluoxetina y psicoterapia (71%), en comparación con el que recibió sólo el medicamento (60,6%), la psicoterapia solamente (43,2%) o el placebo (34,8%).
Los investigadores también evaluaron la aparición y seguimiento de pensamientos o intentos de suicidio. Así, frente al 27% de los adolescentes que al inicio del estudio tenía ideas suicidas, al final del tratamiento sólo seguía con esta conducta el 6% de los participantes, habiendo intentado suicidarse el 1,6% (siete pacientes) sin haber completado el suicidio ninguno de ellos. Esta mejoría se produjo por igual entre los cuatro grupos de pacientes.
Los autores del estudio concluyen que tanto la fluoxetina como la psicoterapia deberían ser dos herramientas terapéuticas ampliamente disponibles para el tratamiento de la depresión en adolescentes.
Matices
Por otro lado, en un editorial publicado también en 'JAMA', Richard M. Glass, doctor del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Chicago (EEUU) y editor adjunto de la revista, explica que los resultados de este estudio todavía dejan sin contestar algunas preguntas. Una de ellas es si la fluoxetina es el único psicofármaco eficaz para tratar la depresión en niños y adolescentes. "Las respuestas a esta cuestión no están claras debido al ocultamiento de importantes datos de ensayos clínicos controlados sobre los inhidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) [o fármacos antidepresivos]".
Otra duda que no ha resuelto esta investigación es "si la psicoterapia por sí sola es eficaz para tratar a adolescentes con una depresión moderada o grave", comenta el doctor Glass.
"La reducción de ideas suicidas a lo largo del tiempo es tranquilizador, pero el incremento del riesgo de episodios adversos relacionados con una conducta dañina observada en los pacientes que tomaron fluoxetina sugiere que el aumento de la actividad, irritabilidad o desinhibición asociada algunas veces con los ISRS precisan de un seguimiento más cuidadoso en la práctica clínica", explica el editorialista.
Finalmente, el editorial hace hincapié en la necesidad de ser conscientes del enorme problema que supone la depresión tanto para adolescentes como para adultos e insiste en que el éxito en el tratamiento de esta enfermedad "requiere algo más que una breve visita para prescribir una medicación... Precisa de una prudente valoración y seguimiento en el contexto del desarrollo de la relación médico-paciente".
0 comentarios