MARAGALL: CATALUÑA NO ES ESPAÑA
Maragall, ha defendido una reforma de la Constitución para actualizarla a las necesidades de una España que "es distinta a la de hace un cuarto de siglo". Ha pedido "respeto" para el Estatut, en el que Cataluña dice de forma "clara" que "somos una nación", con "identidad nacional, personalidad propia, lengua, cultura y derecho civil propio". Es decir diferentes al del resto de España, lo que equivale a decir que Cataluña no es España.
Y mientras Maragall hacía estas declaraciones, que, por supuesto, solo pueden alarmar a paranoicos como nosotros, deseosos de predicar el fin de mundo, -más bien de España-, los socios separatistas de Zapatero no acudían a los actos de celebración de la Constitución. En efecto, las únicas formaciones nacionalistas que estaban presentes en la recepción en el Palacio de las Cortes de la Carrera de San Jerónimo fueron CiU y CC.
Otra de esas señales que nos deben tranquilizar a todos, ya que la Constitución, por supuesto, no corre ningún peligro en manos de ZP. Solos los malintencionados carcas de la ultra, podemos ser tan retorcidos de pensar que el hecho de que el principal socio del gobierno, ERC, desprecie la conmemoración de la constitución, o que el PNV y demás minúsculos partidos nacional-separatistas hagan lo mismo, puede ser un signo de riesgo para el marco de convivencia que diseñó nuestra carta magna.
El hecho de que no sepamos cuales van a ser y hasta donde van a llegar las concesiones de Zapatero a ETA, (lo de que confía en el fin de la violencia y que “no dejará pasar la ocasión si hay oportunidad", ya nos lo sabemos de memoria), mientras la banda asesina sigue con sus habituales tácticas de terror, para recordarnos que siempre puede volver a matar, tampoco debe ser motivo de preocupación según parece.
Los españoles debemos estar tranquilos, Zapatero se ocupa de todo. Dios nos coja confesados.
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