¡Ya está bien!
¿CANON DIGITAL A LOS MÓVILES?
Yo conozco a mucha más gente que no utiliza el móvil más que para hablar o, como mucho, mandar mensajes SMS, que gente que utiliza el móvil para escuchar música. De entre los que escuchan música, muchos habrán trasladado al móvil una canción de un CD que compraron a un precio abusivo (como ya denuncian algunos cantantes) o se la habrán descargado legalmente. Y habrá, sin duda, también habrá muchos que se bajen al móvil temas procedentes de la piratería. Pues bien, mi madre, que sólo utiliza el móvil para hablar, resulta que tendrá que pagar a la SGAE un canon para compensarle de una práctica que nada tiene que ver con ella y enviar dinero de su pensión de viuda a una organización boyante donde las haya. Y algunos dirán que se hace en defensa de la creación y hasta que se trata de una medida progresista.
Yo creo que eso es simplemente un a estafa para todos los usuarios que nada tienen que ver con la piratería. Creo, incluso, que, de prosperar este disparate, que a quien se haga una descarga legal le llevaría a pagar por dos conceptos al autor, se debería crear una plataforma popular que llevara a quien sea pertinente a los tribunales. Pienso que nunca como en esta ocasión se ha visto que los poderes públicos se pongan de una manera similar al servicio de un colectivo particular.
Sinceramente, da la impresión de que a la SGAE casi le jode que escuchemos musica. Pero quiero ir un poco más allá. ¿Por qué tengo que pagar yo a la SGAE y no tienen los autores que pagarme a mi por poner a su disposición un medio a través del que generan derechos? En este absurdo en el que os encontramos, sigamos tirando del hilo: ellos generan derechos por utilizar gratis mis soportes digitales para comercializar sus productos. Pues que me paguen una comisión o que me regalen el teléfono, el mp3, el ordenador… es decir toda la inversión que yo hago y que luego ellos utilizan gratis para recaudar sus remuneraciones. ¡Ah!, y no sólo a los que escuchan música, a todos. Porque encima de ahorrase producir y distribuir los CD, quieren que quienes pagamos una canción en iTunes, les paguemos por el iPod, el iPhone,. el iMac y quien sabe si hasta por el iNtelecto. ¡Ya está bien!
Mira que el otro día fui suave en el post de No hay derechos, pero estoy un poco harto de todo esto. Y lo peor es que luego un tribunal acabará dando la razón a los consumidores, pero ya habrán recaudado no sé cuántos millones y, como es imposible devolver un poquito a millones de ciudadanos, oye, pues ya nos lo quedamos. Y parte de la pensión de viudedad de mi madre, y de las abuelas, y de las becas de los estudiantes, y del sueldo de los mileuristas y de los inmigrantes (un poquito de demagogia siempre viene bien) en los bolsillos de quien ya se sabe. ¡Viva la cultura popular!, es decir, la que financia el pueblo.
¿Habrá alguien que imponga la cordura en todo esto?
0 comentarios