Una explosión en Cerámicas San Antolín causa un muerto y 6 heridos
Origen. La obstrucción de la salida de una máquina mezcladora adquirida hace 4 meses causó la deflagraciónran las doce del mediodía cuando toda Palencia volvió la vista hacia la carretera de Santander. Ambulancias, coches de Bomberos, Policía y Guardia Civil se dirigieron hacia la fábrica de Cerámicas San Antolín ante la llamada de uno de sus trabajadores que alertó a los servicios médicos de una potente explosión en una de las naves anexas.
El resultado de la deflagración no podía ser peor. El palentino Luis Ángel Solano Cala, de 28 años de edad, era arrojado a 30 metros de la máquina que explosionó y fallecía a causa de las heridas, sin que la rápida intervención de los servicios médicos pudiera evitarlo.
Otros seis compañeros, de entre 20 y 50 años, sufrían heridas de diversa consideración. A última hora de ayer, dos de ellos permanecían ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Río Carrión con pronóstico reservado.
Junto a Luis Ángel se encontraban en ese momento otros 30 trabajadores de los 42 que forman la plantilla. Afortunadamente, en el momento de la explosión sólo siete de ellos se encontraban cerca de la máquina causante de la catástrofe. Los más veteranos del lugar rememoraban otro accidente mortal sucedido en el año 84. Veinte años después, se repetía la tragedia con un empleado que llevaba cuatro años en la factoría y que disfrutaba de un contrato indefinido. Hoy se celebrará su funeral en la Parroquia de San Marco a las 11,00 de la mañana.
investigación. La Guardia Civil procedió ayer mismo a comenzar las investigaciones para dilucidar cuál fue el origen de la explosión. Tal y como informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno, aseguraron que la deflagración se produjo por un fallo en la máquina de mezcla de los componentes llamada Monoblock.
Al parecer, se obstruyó un orificio de salida de la mezcla, lo que produjo un aumento de la presión y la posterior expulsión de la compuerta y del barro que se encontraba en su interior. Los empleados que se encontraban en esos momentos más cerca de la máquina sufrieron las consecuencias.
Tal y como pudo saber este rotativo, la máquina fue adquirida hace apenas cuatro meses, por lo que nadie se explica cómo sucedió esta tragedia. Máxima cuando hace dos días se procedió a la revisión de la misma y a la sustitución de una de sus hélices.
Las consecuencias de esta tragedia no se han hecho esperar y, junto a las muestras de solidaridad de los distintos representantes políticos de la provincia, CCOO anunció una concentración frente a Cerámicas San Antolín para exigir un mayor compromiso de las empresas en materia de prevención de riegos laborales.
El resultado de la deflagración no podía ser peor. El palentino Luis Ángel Solano Cala, de 28 años de edad, era arrojado a 30 metros de la máquina que explosionó y fallecía a causa de las heridas, sin que la rápida intervención de los servicios médicos pudiera evitarlo.
Otros seis compañeros, de entre 20 y 50 años, sufrían heridas de diversa consideración. A última hora de ayer, dos de ellos permanecían ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Río Carrión con pronóstico reservado.
Junto a Luis Ángel se encontraban en ese momento otros 30 trabajadores de los 42 que forman la plantilla. Afortunadamente, en el momento de la explosión sólo siete de ellos se encontraban cerca de la máquina causante de la catástrofe. Los más veteranos del lugar rememoraban otro accidente mortal sucedido en el año 84. Veinte años después, se repetía la tragedia con un empleado que llevaba cuatro años en la factoría y que disfrutaba de un contrato indefinido. Hoy se celebrará su funeral en la Parroquia de San Marco a las 11,00 de la mañana.
investigación. La Guardia Civil procedió ayer mismo a comenzar las investigaciones para dilucidar cuál fue el origen de la explosión. Tal y como informaron fuentes de la Subdelegación del Gobierno, aseguraron que la deflagración se produjo por un fallo en la máquina de mezcla de los componentes llamada Monoblock.
Al parecer, se obstruyó un orificio de salida de la mezcla, lo que produjo un aumento de la presión y la posterior expulsión de la compuerta y del barro que se encontraba en su interior. Los empleados que se encontraban en esos momentos más cerca de la máquina sufrieron las consecuencias.
Tal y como pudo saber este rotativo, la máquina fue adquirida hace apenas cuatro meses, por lo que nadie se explica cómo sucedió esta tragedia. Máxima cuando hace dos días se procedió a la revisión de la misma y a la sustitución de una de sus hélices.
Las consecuencias de esta tragedia no se han hecho esperar y, junto a las muestras de solidaridad de los distintos representantes políticos de la provincia, CCOO anunció una concentración frente a Cerámicas San Antolín para exigir un mayor compromiso de las empresas en materia de prevención de riegos laborales.
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