Reunión crucial entre Zapatero y Rajoy tras el 'alto el fuego' de ETA

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente del PP, Mariano Rajoy, llevan más de dos horas reunidos en Moncloa para analizar el "alto el fuego" anunciado por ETA el pasado miércoles. Hasta el encuentro, el PP había reivindicado el Pacto Antiterrorista y el Ejecutivo apelaba a "la responsabilidad y la unidad".

Zapatero bajó hasta la puerta del coche de Rajoy a su llegada a La Moncloa y posteriormente ambos posaron sonrientes para los medios gráficos mientras se daban un prolongado apretón de manos.

Esta mañana, dos horas antes del encuentro en Moncloa, Mariano Rajoy ha afirmado en declaraciones a Punto Radio que ETA debe "lanzar un comunicado en el que anuncie que deja la violencia de manera definitiva", ya que, para él, como dijo el pasado miércoles, el anuncio de alto el fuego es una "pausa".

"Yo no movería pieza hasta que ETA no demuestre la voluntad inequívoca de que deja las armas", ha afirmado el líder del PP preguntado por la supuesta existencia de una hoja de ruta entre el Gobierno y ETA.

Asimismo, consultado sobre la política de presos que habría que seguir en la nueva situación, Rajoy ha dicho que "no hay que hablar de eso", una vez más, mientras ETA no muestre su "voluntad inequívoca" de que abandona las armas.

El presidente del PP ha manifestado que el único documento de referencia con el que asiste a Moncloa es el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo y que espera que el encuentro de hoy sirva para "retomar algo que nunca se debió haber roto". "Me gustaría que se diera cuenta que era bueno y positivo y volviera a él", ha añadido.

Además, el líder de la oposición ha comentado también la situación en la que quedaría Batasuna si ETA deja de matar. En caso de que hubiera un "alto el fuego definitivo", apunta Rajoy, ETA dejaría de existir y, por tanto, Batasuna dejaría de defender la violencia, dejaría de existir como tal y, entonces, según Rajoy, "sería legal".

Preguntado sobre si este alto el fuego supone el fin definitivo de la violencia, Rajoy no se pronunció porque "sería una quiniela", pero se mostró esperanzado en que, estando en 2006, "por muy locos que estén en ETA, alguien les ha tenido que decir que a tiros no van a conseguir nada" y que, después de los atentados del 11-S y del 11-M, los terroristas se habrán dado cuenta de que "esto de matar no es popular" y que "no van a conseguir sus objetivos políticos matando". Sin embargo, para Rajoy, "lo importante es que no los consigan dejando de matar".

Sobre la posible influencia de la tregua en el caso Otegi, Mariano Rajoy señaló que "lo que sería tremendo es que, si el juez considerase que tiene que decretar el ingreso en prisión de Arnaldo Otegi, no lo hiciera. El estado de derecho no está en tregua ni puede estarlo".

Rajoy y Zapatero, durante la reunión. (Foto: EFE)

El Gobierno, optimista

El Gobierno afronta la reunión de La Moncloa con el convencimiento de que, tras el anuncio de ETA, "es tiempo para la responsabilidad y la unidad". Así lo expresaron fuentes del Ejecutivo que aseguraron que Zapatero trasladará en privado a Rajoy lo que ya tuvo oportunidad de decirle públicamente la pasada semana ante el pleno del Congreso.

La vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha mostrado su confianza en que esta cita al más alto nivel en Moncloa sirva para que ambos partidos "construyan juntos" una "estrategia común para recorrer juntos" el camino para llegar al "futuro que tanto deseamos". Preguntada si esta reunión entre Zapatero y Rajoy supondrá un antes y un después en esta legislatura, la vicepresidenta ha expresado su esperanza de que así sea.

Ante el reiterado llamamiento del líder 'popular' de 'resucitar el Pacto Antiterrorista", De la Vega ha subrayado en una entrevista en la Mirada Crítica de Telecinco que este acuerdo "sigue en vigor" y sostiene, no obstante, que "estamos ante una situación nueva", "que va un poquito más alla" de lo establecido en el Pacto.

El propio Zapatero garantizó a Rajoy ante el Congreso, el mismo día del anuncio de ETA, que la actitud del Ejecutivo con el PP a partir de ahora será "de máxima información y máxima colaboración". Además, en una posterior comparecencia ante los medios, el jefe del Gobierno aseguró tener "la máxima confianza" en el líder del PP y en este partido ante la tarea común que hay por delante.

Por su parte, Mariano Rajoy ya adelantó a Rodríguez Zapatero durante la última sesión de control al Gobierno del Congreso que ofrecería su apoyo al Ejecutivo en este proceso, pero siempre y cuando se cumplieran tres condiciones: que no se pague ningún precio político a ETA, que se preserve la dignidad y memoria de las víctimas y que la Policía y los jueces no dejen de actuar contra los terroristas.

El pasado viernes, en Bruselas, el presidente del Gobierno avanzó que, si el Estado verifica la voluntad de ETA de abandonar la violencia, comparecerá ante el Parlamento antes del verano para recabar apoyo de los grupos políticos para un posible diálogo con la banda. En la reunión de Moncloa, Zapatero, previsiblemente, le expondrá a Rajoy sus planes hasta llegar a ese punto.

La reunión entre el presidente del Gobierno y el líder del principal partido de la oposición será la quinta entre ambos en lo que va de legislatura. El último encuentro se produjo el pasado 5 de septiembre y evidenció la falta de acuerdo entre los líderes de los dos principales partidos políticos en lo relativo a los asuntos de Estado.