Las víctimas del terrorismo hablan: 'El alto el fuego puede ser el inicio del fin de ETA'
"Las víctimas del terrorismo, que conocemos el sufrimiento que provoca el empleo de la violencia con fines políticos, somos las mayores interesadas en que el terrorismo acabe definitivamente en España", indica el comunicado.
Añade que "el alto el fuego permanente anunciado por ETA no constituye el final del terrorismo", aunque las víctimas opinan que puede ser "el punto inicial" de un proceso que logre este objetivo.
"Ello dependerá del acierto del Gobierno en el desarrollo de una política que conduzca a la victoria de la sociedad democrática sobre el terrorismo", señalan las asociaciones, que creen necesario el acuerdo de los partidos firmantes del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, "para afrontar con unidad la situación creada con el anuncio de ETA".
Las víctimas piden "firmeza para evitar la impunidad de los terroristas" y señalan que "el final del terrorismo no puede conducir a la frustración de las aspiraciones de justicia de las víctimas del terrorismo y de la sociedad española".
El comunicado está firmado por la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT), Colectivo Víctimas del Terrorismo del País Vasco (COVITE), Asociación Víctimas del Terrorismo Verde Esperanza, Fundación Miguel Ángel Blanco, Fundación Coronel Médico Muñoz Cariñanos, Fundación Tomás Caballero, Fundación Gregorio Ordóñez, Asociación Ayuda Víctimas 11-M, Pablo Broseta, Francisco y Teresa Jiménez Becerril y el Foro de Ermua.
Llamamiento a la responsabilidad
Con posterioridad a la difusión del comunicado, el presidente de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Francisco Alcaraz, ha mostrado en declaraciones a Europa Press su confianza en que la banda terrorista anuncie en un tercer comunicado el abandono de las armas y su disolución, algo que, según dijo, el Gobierno prometió a las víctimas que sería "imprescindible" para poder iniciar un proceso de negociación.
El fin de ETA 'dependerá del acierto del Gobierno en el desarrollo de una política que conduzca a la victoria de la sociedad democrática sobre el terrorismo'
Alcaraz precisó que las víctimas del terrorismo quieren dejar claro que son "los primeros interesados en que el terrorismo acabe" y apeló a la responsabilidad del Gobierno para gestionar una política que conduzca a la victoria de la democracia sobre los terroristas.
Teresa Jiménez Becerril, hermana del concejal asesinado por ETA en Sevilla en 1998, cree que el comunicado ha sido "tergiversado" por los medios de comunicación, ya que lo que desean las víctimas es la "rendición, la entrega de las armas y la disolución de la banda".
"El comunicado éste se ha interpretado como un aval al Gobierno por parte de la Asociación de Víctimas del Terrorismo", ha dicho Jiménez Becerril, que ha añadido que "entre las víctimas hay mucho temor a decir las cosas como son".
El presidente de la Asociación Catalana de Víctimas del Terrorismo, Roberto Manrique, pidió por su parte "cautela" y "prudencia" ante el anuncio de la tregua permanente de ETA porque, aunque lo consideró un paso "positivo", apuntó que "no es la primera vez que oímos un anuncio de tregua permanente y hasta ahora ETA no ha dejado de matar".
Manrique señaló que pese a las dudas que ha generado este anuncio las víctimas esperan que "ETA cumpla esta vez con lo anunciado".
'Vencedores y vencidos'
La mayoría de estas asociaciones reaccionaron con cautela ante el anuncio de alto el fuego del pasado miércoles. Ese día lamentaron que la banda terrorista no hubiese anunciado el abandono de las armas.
Una de las manifestaciones de mayor desconfianza partió de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, que agrupa casi al 90% de ellas. Su presidente, José Alcaraz, muy crítico con la política antiterrorista de Zapatero, advirtió el 22 de marzo que la tregua era "una trampa" y que con este último mesanje "ETA pretende conseguir lo que no ha conseguido con 1.000 muertos: la autodeterminación".
A mediados del pasado mes de febrero, las víctimas del terrorismo se reunieron con el presidente del Gobierno en La Moncloa días después de la celebración del III Congreso de Víctimas del Terrorismo, al que no acudió José Luis Rodríguez Zapatero. En ese encuentro, este colectivo manifestaron ante el jefe del Ejecutivo que desean la paz, pero "no a cualquier precio", porque debe haber "vencedores y vencidos" y la voz de los terroristas no se puede situar por encima de la de sus víctimas.
La presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, leyó entonces un decálogo de premisas sobre cómo debe, en su opinión, construirse la paz en el País Vasco. Entre esos puntos destacan afirmaciones como que los terroristas no pueden ser "interlocutores sociales", que la paz no se puede edificar "sobre el vacío histórico y la desmemoria", o que "cualquier tentación de impunidad judicial debe ser rechazada"
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